Ya adquiriste la capacidad y juicio necesarios para el cuidado en casa.
- Tu bebé es capaz de alimentarse exitosamente por la boca y crece bien con la leche materna y/o fórmula.
- Tu bebé será capaz de controlar su temperatura corporal y de mantenerse a sí mismo tibio sin la ayuda de una incubadora.
- Podrá respirar con regularidad excepto por alguna apnea ocasional. Algunos bebés podrían irse a casa con oxígeno o un monitor.
- Su condición médica es estable y se cubrieron todos los problemas médicos no resueltos.
Las enfermeras de la UCIN están capacitadas para ayudarte a alistarte y guiarte para que practiques las rutinas diarias de tu bebé antes de llevarlo a casa. Ellas te ayudarán a bañarlo y te enseñarán a cambiar sus pañales, así como asesorarte sobre todas las actividades del cuidado diario y responderán todas tus preguntas acerca de la alimentación.
También pueden enseñarte cómo tomar la temperatura de tu bebé, darte indicaciones acerca del uso de cualquier medicamento y monitorear los signos de enfermedad. Si tu bebé va a casa con oxígeno o en algún tipo de monitor, te mostrarán cómo conectarlo y hacerlo funcionar.
Mientras tu bebé permanece en la UCIN, es buen momento para tomar un curso sobre resucitación cardiopulmonar (RCP) infantil. Este curso salvavidas te enseñará cómo hacer que los pulmones y corazón de tu bebé funcionen nuevamente si alguna vez dejaron de hacerlo por cualquier motivo. Existe una alta probabilidad de que no necesites usar RCP en tu bebé, pero conocerla incrementará tu confianza y podría salvar su vida.
Llevar a tu bebé a casa es un gran paso, pero ¡sabemos que puedes lograrlo! Pasar tiempo con tu bebé en la UCIN antes de ir a casa te ayudará a familiarizarte con sus cuidados.
El personal médico de la UCIN hará todo lo que esté a su alcance para que la transición a casa sea el evento maravilloso que has estado esperando.